MADRID (Reuters) - La enfermedad neurológica que padece el primer presidente de la transición democrática española Adolfo Suárez se ha agravado en los últimos días y su desenlace "es inminente", según anunció el viernes su hijo, Adolfo Suárez Illana.
Suárez, de 81 años y enfermo de Alzheimer desde hace 11, lleva varios días ingresado en un hospital madrileño a causa de una neumonía.
Suárez Illana señaló que previamente había comunicado el estado de salud de su padre al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y al rey Juan Carlos, que guarda una estrecha relación con la familia Suárez.
"Simplemente le vamos a apoyar para que médicamente no tenga ningún tipo de sufrimiento y dejarle marchar en paz", agregó Suárez Illana, que terminó su comparecencia entre lágrimas y con el aplauso de los periodistas.
El expresidente, según su hijo, ha pasado felizmente estos días, en los que se encuentra acompañado de toda su familia.
Suárez - doctor en derecho - fue elegido en 1976 por el rey Juan Carlos I para presidir el Gobierno que convocaría las primeras elecciones democráticas en España en casi 50 años, y de cuyo Parlamento salió la Constitución española de 1978, una de las más longevas de la historia de España.
"Gracias al Rey, él pudo hacer lo que más le gustaba en un momento único en la historia de España. Esos dos hombres cambiaron el rumbo de la historia", dijo Suárez Illana.
El estado mental y físico del que fuera primer presidente constitucional de España tras la dictadura de Franco se ha ido deteriorando lentamente en la última década, en la que dejó de recordar que llegó a ser presidente.
"Ojalá pueda superar esa situación, vamos a esperar con serenidad. Yo, como la inmensa mayoría del pueblo español, estoy con Adolfo Suárez", dijo desde Bruselas el presidente del Gobierno Mariano Rajoy.
Suárez, que legalizó el Partido Comunista (PCE) en 1977, justo antes de las primeras elecciones democráticas en España, ocupó varios cargos durante el régimen de Francisco Franco, y en la última década ha estado aislado de la vida pública.
"Llevamos 11 años preparándonos, pero nunca es facil", dijo Suárez Illana en su comparecencia, antes de romper a llorar.
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