MADRID (Reuters) - La reforma fiscal española revertirá para los contribuyentes toda la subida del impuesto sobre la renta aprobada a finales de 2011 y supondrá una rebaja de la fiscalidad del ahorro, dijo el ministro de Economía, Luis de Guindos, en declaraciones publicadas el sábado por tres periódicos financieros.
Respecto al impuesto sobre el valor añadido (IVA), que los expertos encargados por el Gobierno abogarían por subir del 21 al 22-23 por ciento, De Guindos descartó "cambios importantes" en este capítulo por estar ya "prácticamente alineado con la media europea".
España ha rechazado en varias ocasiones un nuevo incremento del IVA, pero Bruselas se queja de que permita que muchos artículos solo paguen el impuesto súper reducido, del 4 por ciento, por lo que no se descarta que haya cambios en algunos elementos que gravan por ese tipo impositivo.
El ministro dijo que el objetivo de la reforma fiscal, que previsiblemente se aprobará en el primer semestre de este año y entrará en vigor de forma progresiva entre 2015 y 2017, era incentivar el crecimiento a medio y largo plazo, en un momento en el que la economía española está saliendo de una larga recesión.
"La idea es, en cuanto al impuesto sobre las personas físicas (IRPF), facilitar el ahorro, que en estos momentos está sin duda bastante penalizado, y hay que revertir la subida que tuvimos que tomar a finales del año 2011", dijo De Guindos.
En línea con lo esperado, el ministro añadió que la rebaja de tipos en el IRPF estaría acompañada de la "reconsideración" de algunas deducciones, aunque dijo que no necesariamente afectarían a la actualmente en vigor por la compra de vivienda.
SECTOR BANCARIO
Respecto a la situación del sistema bancario español y sus entidades nacionalizadas, De Guindos dijo que en dos meses se comunicaría el plan estratégico que maximice la salida del FROB del capital de Bankia, lo que supone un adelanto con respecto a los planes iniciales del Ejecutivo español.
"Ha habido modificaciones. Ahora es cierto lo que no ocurría hace seis meses, que son las muestras de interés por Bankia que se han producido en los últimos meses", explicó el ministro, señalando que el FROB tenía posibilidades de tener "ingresos importantes" con Bankia.
Sobre Catalunya Banc, dijo que se privatizaría antes del verano sin "trocearla", aunque admitió que "pueden venderse negocios específicos o carteras".
Según el ministro, la banca española pasará "sin problemas" los test de estrés europeos de este año "en términos prácticamente totales", porque "la inmensa mayoría de los bancos españoles" estarían encima del nivel de capital del 6 por ciento exigido.
De Guindos se mostró convencido de que el crédito nuevo crecería en 2014, y entre las alternativas a la financiación tradicional de las empresas, dijo que el Gobierno modificaría la gestión de los fondos de inversión mobiliaria para hacer más fácil su constitución en España.
"Vamos a facilitar la constitución y funcionamiento de los fondos de capital riesgo; vamos a hacer modificaciones en las instituciones de inversión colectiva, con los fondos de facturas, para que haya una fórmula adicional no bancaria de financiación; (...) y vamos a regular la hipoteca mobiliaria, que tiene una regulación muy antigua y existe en otros países, y que aquí no se utiliza nada de nada", explicó.
Respecto al posible factor desestabilizador para la economía española que supone el impulso separatista desde Cataluña, De Guindos afirmó que los inversores perciben que la secesión de cualquier territorio de un país de la Unión Europea es imposible.
"A mí prácticamente no me lo han sacado como un tema constante, me preguntan sobre el crecimiento económico, la competitividad, el déficit público. Este tipo de cuestiones sobre todo. De Cataluña yo no veo una inquietud, porque creo que los inversores internacionales se basan en hipótesis racionales y razonables", dijo.
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