MADRID (Reuters) - El Gobierno valenciano prevé recaudar 230 millones de euros el próximo año con un impuesto sobre los depósitos bancarios que pagarán las entidades financieras, en un intento por cuadrar sus cuentas ante lo que consideran una infrafinanciación por parte del Estado a la comunidad, confirmó el miércoles un portavoz de la Hacienda regional.
La iniciativa de Valencia, gobernada por el Partido Popular al igual que el Ejecutivo central, choca frontalmente con la pretensión del Ministerio de Hacienda de proteger la unidad del mercado bancario interior, plasmada en la creación de un impuesto estatal sobre los depósitos que entró en vigor el pasado 1 de enero con un tipo cero.
El impuesto valenciano, adelantado por el diario Expansión, prevé gravar a las entidades con un tipo que va del 0,3 al 0,5 por ciento la parte de los depósitos que provengan de captaciones realizadas por las oficinas bancarias situadas en la Comunidad Valenciana.
La medida -introducida en una enmienda del PP valenciano a los presupuestos regionales de 2014 que deben aprobarse a final de año- podría abrir la puerta a que otras comunidades sigan sus pasos y aprueben en sus cuentas del próximo año tasas similares para elevar sus ingresos y facilitar su cumplimiento del déficit.
Consultada por Reuters, una portavoz de la patronal bancaria AEB rechazó de plano la propuesta argumentando, como ya hizo en su día con el impuesto aplicado en Cataluña, que se trata de una imposición que "penaliza el ahorro y fragmenta y resta eficacia al mercado financiero español".
La posibilidad de que las Comunidades Autónomas (CCAA) graven por su cuenta los depósitos bancarios se encuentra pendiente de pronunciamiento por parte del Tribunal Constitucional, que el pasado mayo levantó la suspensión sobre la tasa en Cataluña a la espera de pronunciarse sobre el fondo de la cuestión.
"Hay un vacío que se ha estudiado legalmente y consideramos que podemos utilizar ese impuesto, sin repercutirlo sobre los ciudadanos", dijo a Reuters el portavoz de la Hacienda valenciana.
"Se ha hablado con Hacienda y no nos han trasladado ni una opinión favorable ni desfavorable. Van a tener que pronunciarse al respecto. Si no tienen tomada decisión, nosotros tenemos que avanzar y presupuestar", añadió.
IMPUESTO EN REVISIÓN
Desde el Ministerio de Hacienda no se quiso entrar a valorar la iniciativa de Valencia y se reiteró la postura oficial del responsable del ramo, Cristóbal Montoro, que dijo recientemente que se estaba en proceso de revisar ese impuesto y que aún no se había tomado una decisión al respecto.
Aunque el portavoz valenciano negó que el impuesto supusiese ningún órdago al Gobierno central, sí enmarcó la decisión en las dificultades de la región para financiarse con el actual modelo.
"Valencia reclama un nuevo modelo de financiación con un nuevo reparto (...) Se ha hecho una revisión de todo y no puede recaer todo sobre los ciudadanos", declaró, recordando los recortes realizados en la comunidad en el último ejercicio y la medida adoptada recientemente de cerrar la televisión autonómica.
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