BURGOS/GAMONAL: EL ALCALDE ANUNCIA LA PARALIZACIÓN DE LAS OBRAS

MADRID (Reuters) - El alcalde de Burgos anunció el viernes por la tarde que paraliza de forma definitiva unas polémicas obras en el barrio de Gamonal que han sido objeto de protestas y disturbios en la ciudad castellana que habían comenzado a extenderse a otras ciudades españolas.

"Ante esta nueva situación y después de mucho análisis y reflexión, vemos la imposibilidad material de ejecutar esta reforma y hemos decidido la paralización definitiva de las obras apostar por la convivencia en la ciudad", dijo el alcalde, Javier Lacalle, en una rueda de prensa, anunciando una decisión que esta misma mañana había rechazado.

Las obras autorizadas por el Partido Popular, que tiene mayoría absoluta en el Ayuntamiento de Burgos, pretendían modificar una de las principales calles de la ciudad en el barrio de Gamonal, pero fueron recibidas con la oposición de muchos vecinos.

La fuerte oposición vecinal, que después de semanas de manifestaciones desembocó el fin de semana pasado en disturbios en los que hubo más de 40 detenidos, se debe a motivos como el elevado coste económico del proyecto, estimado en entre 8 y 13 millones de euros en un momento de crisis económica y recortes por parte de las administraciones públicas en España.

Lacalle anunció el martes que paralizaba temporalmente las polémicas obras a la espera de mantener una serie de encuentros con colectivos afectados.

El viernes, el Partido Socialista, Unión Progreso y Democracia e Izquierda Unida presentaron cada uno una moción en la que pedían parar las obras totalmente, pero fueron rechazadas y solo salió adelante la del PP, que tiene 15 de los 27 concejales del ayuntamiento, condenando los disturbios en la ciudad.

Centenares de personas se concentraron fuera del ayuntamiento gritando "dimisión", lo que suscribió en el pleno el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento, Luis Escribano.

Asociaciones como la de vecinos del Gamonal han criticado el plan de construir un aparcamiento subterráneo y peatonalizar la calle Vitoria, rechazando aspectos como el elevado coste de las plazas de aparcamiento, mientras que el alcalde ha defendido que el proyecto iba en el programa electoral que recibió el apoyo de los ciudadanos y que hubo un debate previo, con exposiciones y reuniones.

El apoyo a los detractores del proyecto se ha extendido a otras ciudades del país, y en Madrid ha habido varias concentraciones esta semana que acabaron con incidentes y más de una decena de detenidos.

La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, instó a que las manifestaciones transcurran de forma pacífica.