MADRID (Reuters) - El senador y diputado por el Partido Popular en la Asamblea de Madrid Francisco Granados anunció el jueves que posiblemente abandonará la política en las próximas horas, después de reconocer la víspera que tuvo una cuenta millonaria en Suiza.
Granados rectifica así tras afirmar el miércoles que no se planteaba dimitir, después de que el diario El Mundo informara de que la justicia suiza había comunicado a España que el que fuera secretario general del PP madrileño había acumulado al menos 1,5 millones de euros en un depósito en Suiza.
"No tengo por qué aferrarme al escaño porque yo tengo un puesto de trabajo en un banco de inversión francés. Llevo mucho tiempo dándole vueltas a volver a la empresa privada, agregó.
Granados afirmó que había tributado en España la parte de los rendimientos de la cuenta, que dijo que estaba a su nombre y no al de una sociedad, y añadió que no está "contento" con su cargo en la administración.
"Tuve una cuenta en Suiza que abrí en el año 96 y que cerré en cuanto entré en política en el 2000. Comprendo que hay a quien le pueda sorprender pero es que tengo una vida anterior a la política. No entiendo por qué sale esto ahora, estoy dolido y apenado", sostuvo.
Granados, considerado uno de los hombres de confianza de la expresidenta de Madrid Esperanza Aguirre, alcanzó la alcaldía de la localidad madrileña de Valdemoro en julio de 1999, habiéndolo intentado sin éxito en 1995. Según El Mundo, la cuenta estaba abierta desde 1999 y fue detectada por Suiza en 2013.
Tras conocer la noticia sobre la posible marcha de Granados, Aguirre, que actualmente es presidenta del PP en Madrid, apoyó la decisión.
"Me parece estupendamente bien, eso quiere decir que no tiene las pruebas de haber repatriado el dinero (...) Pero me parece que eso es un gesto de dignidad, un político no puede tener cuentas en Suiza", dijo la madrileña en una entrevista con Antena 3.
Varios miembros de la oposición pidieron el miércoles la dimisión de Granados, que fue también Consejero de Presidencia e Interior de la Comunidad de Madrid entre 2008 y 2011.
El Partido Popular ha sufrido una caída en su popularidad en parte debido a un escándalo de supuesta corrupción por el que su extesorero Luis Bárcenas se encuentra en prisión preventiva.
Según Bárcenas, que poseía cuentas en Suiza en las que acumuló más de 40 millones de euros y que durante más de 20 años gestionó las finanzas del PP, hubo abonos de dinero por parte de empresarios y pagos de sobresueldos a dirigentes populares, incluido el actual presidente del Gobierno, Mariano Rajoy.
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